Debe haber un fenómeno "creador",
pero muy peculiar por eso permitan que entrecomille:
Dios al final emergiendo de nuestras calaveras.
Creación que desde su fin se realiza a sí misma
(No crean que desatino cuando algo parecido dice la mecánica cuántica:
El observador dando carta de entidad o de existencia a lo observado)
Dios al final emergiendo de nuestras calaveras
como la flor definitiva:
Origen de la Vida.
Precioso nombre para una flor,
en el vademécum botánico la escribo en tu nombre hermana
(Hoy, 2008, con el permiso de Alejandra,
¿la que de mí se despidiera en 2005, de su cercanía de ángel a mi vera en esta tierra
diciendo aquel poema inacabable a todas las flores del Universo?
Origen de la Vida, Alejandra,
sé que eso viniste a pasarme, enseñarme, mostrarme,
¿qué, quién lo impidió?
¿quién, qué me impide dar este Salto de mí a tu Alba
y se acaban las torturas físicas psíquicas?)
En tu nombre hermana la bautizo,
tú entre sus pétalos.
Tú descendiendo
Aurora Fin de los Tiempos,
tú entre todo otro tú.
Flor emergiendo
mañana abriéndose
más capa protectora que el ozono,
tú entre todo otro tú.
Porque la muerte me disminuye:
Tú entre todo otro tú
que nunca debió abandonarnos.
¡¡¡Muerte o Resurrección!!!:
No tengo nada más que pedir al mundo.
En tu nombre mi nombre,
en el nombre de esta Flor,
Origen de Todo
desde el Final de Todos.
Tú entre todo otro tú
que Dios seremos,
que Dios somos.